Hace unas pocas semanas, si acaso, recibí un correo de una amiga de Rafael Menjívar, extraordinario escritor pero mejor amigo. Me decía que estaba enfermo, probablemente muy enfermo, y que quería que me enterara de la difícil situación por la que estaba pasando. De hecho, hace poco escribí una pequeña reseña de un libro de él, que encontré en la librería Gandhi a un precio ridículo. He aquí el comentario que el propio Rafael dejó en esa entrada del blog:
"Siempre leo tu blog, Morsita, y a veces envío tus posts a amigos interesados especialmente en ajedrez y cosas de física. Por cuestiones de orden alfabético, casi siempre estás en la parte más alta de la lista del Reader, así que tus posts son mi desayuno. (Hace años que no desayuno más que posts y agua; cosas de uno.)
Gracias por leer el libro, y gracias por el hecho de que te haya gustado.
Un abrazo como siempre."
A Menjívar lo conocí gracias al BBS (Bulletin Board System), de Javier Matuk, en el cual discutíamos con muchos otros personajes, Mauricio José Schwarz, Haydn Rawlinson, Sandro Cohen, Salvador de la Mora, Jesús Wong, Susana Marín, entre muchos otros (perdón por los que olvide en estos momentos), sobre todos los temas posibles. Una vez, por ejemplo, dije que yo a la palabra "Dios" no le ponía mayúsculas, porque no le asignaba ningún respeto extra a este personaje. Llovieron respuestas y recuerdo que Sandro Cohen me aclaró que si hablo de Dios, es nombre propio y lleva mayúsculas. En cambio, si hablo de algún dios, entonces lleva minúsculas. Igualmente, se entabló una larga y enriquecedora discusión sobre el toreo, sobre la crueldad con los animales, etc. Recuerdo una frase de Menjívar, refiriéndose al torero como el personaje con el "funny trajecito", frase que quedó para la posteridad.
Rafa Menjívar no jugaba mucho al ajedrez pero admiraba este arte. Lo sé de cierto. Muchas veces me escribió y me felicitó por los libros que iban saliendo de ajedrez por parte mía. Cuando me decía que le daba gusto ver mi nueva obra publicada, yo sabía que lo decía con esa alegría que sólo los grandes amigos tienen.
Hoy me entero por Fernando Romo (el Popochas), que Rafa falleció. De verdad lo lamento porque era un tipazo. Vi sus últimas fotos en algún evento en donde lo reconocieron, en el Salvador, que era donde ahora vivía. Lo vi tan delgado, tan no él, que me dio cierta tristeza, pero como siempre uno piensa en estos casos, "ya se recuperará, porque él sacará fuerzas de flaqueza". Sin embargo, ahora sé que la enfermedad lo venció. De verdad lo lamento mucho. Descanse en paz el buen Rafa.
(*) En la foto aparece Rafael Menjívar (izquierda), con Salvador de la Mora. La foto sacada del sitio de Salvador en Facebook.
Tidak ada komentar:
Posting Komentar