Rabu, 25 Agustus 2010

De medicinas y negocios asociados


Yo no sé si tengo mala suerte o la vida es simplemente así. Me explico: Hace un par de meses fui al médico, un gastroenterólogo, porque empecé con una diarrea que no se quitaba.El galeno me mandó análisis y aunque en su opinión, la diarrea se quitaría sola, yo no mejoraba. Ante eso, el doctor me dijo que tenía una infección. Me dio un tratamiento de una quince días con cierto antibiótico. Tenía que tomar una pastilla en la mañana y otra en la noche. Cada doce horas, durante diez días. Voy por la medicina a la farmacia y venden dicho medicamento en caja con 28 pastillas. Es decir, yo necesito 30 porque son 15 días a dos pastillas por día. Pero la caja contiene -curiosamente- sólo 28 pastillas. Eso implica comprar otra caja en donde me sobrarán 26 pastillas al término de mi tratamiento.

Otro caso: voy al dentista porque me tienen que operar la encía para hacerme una pequeña intervención que se llama "alargamiento de corona", si mal no recuerdo. Como abren la encía, cortan hueso (1 mm del mismo), y suturan, el especialista que me atendió me dio tres medicamentos: dos para el dolor y la inflamación y uno más para protegerse de alguna infección. La medicina contra la infección me la mandó siete días, dos pastillas por día, cada doce horas. Adivinen cuántas pastillas venían en la caja: 12 pastillas. ¿Mala suerte?

Pero curiosamente esto no sólo pasa con las medicinas. Si por ejemplo, necesito una batería, me venden cuatro. Bueno, probablemente las termine por usar también, pero ojo, necesito una nada más. ¿Por qué me hacen comprar cuatro? ¿mala suerte también o un misterio inescrutable? ¿será quizás una confabulación? ¿Seré paranoico?

Tidak ada komentar:

Posting Komentar