Selasa, 20 September 2011

El tercermundismo que ahoga


Un país como México no tiene ninguna posibilidad de convertirse en parte del primer mundo mientras leamos noticias como la recién publicada por el Universal, que dice así:

 Fragmentos de satélite podrían caer en México

La probabilidad de que alguno de los restos alcance a una persona es muy remota, aunque no se desintegre en el país su entrada a la atmósfera será visible

La visibilidad del satélite UARS en México será en la zona centro y en la región del Pacífico cruzando lo más alto del cielo (Foto: Especial NASA / Heavens Above )

Martes 20 de septiembre de 2011 Andrés Eloy Martínez | El Universal00:54

Fragmentos del satélite UARS (Upper Atmosphere Research Satellite ) de la NASA podrían caer sobre México y desperdigarse en una amplia zona de este país, sin que signifique un grave riesgo para la población de acuerdo a la Sociedad Astronómica Urania en México.

Las predicciones se derivan de los últimos datos orbitales disponibles por parte de la NASA, que muestran la trayectoria de UARS sobrevolando el  territorio mexicano, los días 21,22 y 23 de septiembre, siendo éste último día la fecha estimada para su reingreso en la atmósfera.

De acuerdo a la agrupación astronómica, aunque no se desintegrara en algunos de sus pasos sobre México, el satélite será visible desde una gran parte del centro de nuestro país, como un brillante punto luminoso desplazándose entre las estrellas.

Hasta el momento la fecha exacta del reingreso a la atmósfera del satélite de investigación científica es indeterminado, debido a la inconstante velocidad de frenado aerodinámico que sufre en su rozamiento con la parte alta de la atmósfera, lo que ha llevado a los ingenieros aeroespaciales a dar un margen de tolerancia de más o menos un día, a partir 23 de septiembre.

De acuerdo a Urania, esto significa que el satélite podría desintegrarse entre el 22 y el 24 de septiembre, justo en dos de los tres días que pasara sobre territorio mexicano.

De producirse su destrucción sobre México, el satélite ofrecería un gran espectáculo en el cielo que no podría pasar desapercibido, pues de ser una luz puntual en el cielo de brillo moderado, esta adquiriría un brillo mayor, mientras su masa de más de cinco mil kilos se fragmenta en pedazos, algunos de las cuales se impactaran en la superficie terrestre, hasta un total de 580 kilogramos.

Se vería en el cielo como un bólido o pequeño asteroide desintegrándose en el cielo, señala Urania.

A pesar de ser de ser una cifra amenazante, los fragmentos se dispersaran en una franja de 800 kilómetros, siendo mínima la probabilidad de que ocasione daños materiales o físicos. La probabilidad de que alguno de los restos del satélite de Investigación de la Alta Atmósfera (UARS) alcance a una persona es de una entre 3 mil 200, señaló hoy la agencia espacial estadounidense (NASA).

Los horarios para observar el paso o la posible desintegración del satélite UARS, sobre la zona centro de México serían:
 
  • 21 de septiembre 7:10 de la mañana, justo en el amanecer
  • 22 de septiembre 5:54 horas (sólo en caso de desintegrarse), 6:47 horas pasando muy cerca del brillante planeta Júpiter hacia el oeste
  • 23 de septiembre 6:24 horas muy bajo hacia el sur

Podría hacerse visible antes de alcanzar esta posición si comenzara a desintegrarse, apareciendo desde el noroeste.

La visibilidad del satélite  UARS en México será en la zona centro y en la región del Pacífico donde podrá verse cruzando lo más alto del cielo.

Estaba previsto que el satélite llegara a finales de septiembre o principios de octubre, pero su caída se adelantará debido al fuerte aumento de la actividad solar la semana pasada.

Finalmente la sociedad astronómica Urania señalo que pedazos del satélite podrían caer en los estados de Sonora, Sinaloa, Durango, Nayarit, Jalisco, Michoacán y Guerrero, así como frente a las costas guerrerenses, solicitando a la población reportarles cualquier información sobre posibles fragmentos de UARS, así como videos de su destrucción al siguiente correo electrónico; andsul2009@hotmail.com

En el caso de que los restos del satélite caigan en un área poblada o cerca de una, las Fuerzas Armadas de Estados Unidos advierten de que los ciudadanos no deben tocar estas piezas y, en cambio, tienen que avisar del hallazgo a las autoridades.

Esto es así no sólo por razones de seguridad, sino también porque todos los restos del satélite son propiedad del Gobierno estadounidense, de manera que, insisten las autoridades, "no pueden venderse a coleccionistas ni a través de la página eBay".

El transbordador Discovery transportó en 1991 este satélite de seis toneladas diseñado para medir los cambios atmosféricos y los efectos de la contaminación, que emprendió su camino de regreso a la Tierra hace seis años.

La NASA sigue la trayectoria del satélite junto con otras agencias espaciales extranjeras e informará sobre el movimiento del objeto espacial a medida que éste se acerque a la Tierra.

Hasta aquí la nota.

A ver, nadie sabe, ni la propia NASA, dónde puede caer el satélite artificial. Repito: nadie sabe. La NASA no se atreve ni siquiera a decir cuál es el sitio más probable para la caída de la nave espacial. Los cálculos, a todo esto, son de un obscura sociedad astronómica de ¿qué país? México, por supuesto. Es claro que los personajes que están en dicha asociación quieren sus cinco minutos de fama. Para colmo, El Universal pone esta nota porque fíjense: México puede ser el destino final del satélite en cuestión. De alguna manera de nuevo México en el panorama internacional, y no por el narco, por ejemplo, sino por una cuestión científica... aunque en el fondo el evento de la caída del satélite no tenga nada que ver con la ciencia.

De verdad que así, con este tipo de notas, con esta dizque promoción de México, con esto de sentirnos hasta privilegiados porque caerá en nuestro país aparentemente el satélite a la deriva, solamente hablamos de este tercermundismo que ahoga, que ante la falta de logros y éxitos, entonces apelamos a estos recursos por demás lamentables.

En mi opinión, este tipo de notas nomás nos pinta como lo que somos: un patético país tercermundista. Muy penoso y vergonzoso asunto.

Tidak ada komentar:

Posting Komentar